No, no es tu imaginación: las fiestas decembrinas y el clima invernal sí afectan tu salud mental, y aunque no podemos evitar los bajones ocasionales, sí podemos aminorar el impacto.
Diciembre, inherentemente, es uno de los meses en donde hay más contacto social; muchas personas lo pasan mal porque no tienen la mejor relación con sus familias o han asociado las fechas a recuerdos negativos, es por eso que, pese a las condiciones sociales, se le dé prioridad a la salud mental.
De igual manera, uno de los elementos más emblemáticos de estas fechas es la cena, por ello, personas que padecen Trastornos de Conducta Alimentaria podrían pasarla mal no solo por su relación con la comida, sino por los comentarios innecesarios sobre su físico o su apariencia.
Entonces, ¿cómo sobrevivir a la Navidad?
Esta es una serie de tips que pueden ayudarte en estas fiestas que, para algunas personas, son tan complejas.
- Reconocer las emociones es un aspecto fundamental: Tu cuerpo es sabio, escúchalo, te dirá si se siente cómodo o no en ciertos lugares y situaciones.
- Háblalo: Si no quieres asistir a algunos compromisos, coméntalo con quienes sientas confianza, no te guardes las emociones.
- ¿La Navidad no te trae buenos recuerdos? Bueno, estás en el momento indicado para resignificar las fechas, podrías darte una escapada al bosque, una cena romántica, una noche de amigos…
- Hay mucha gente a tu alrededor que quiere que te la pases bien, dales la oportunidad de que se acerquen a ti y puedas tener un fin de año lleno de amor y cuidados.